
La inquietud constante de nuestros clientes, con preguntas como ¿esta máquina mantiene la
estabilidad de color en tiradas largas?, ¿si vuelvo a lanzar este trabajo saldrá igual?, avala nuestro deseo de que las impresiones mantengan “estabilidad de color” desde el comienzo hasta el final de los trabajos impresos.
Los equipos de producción de última generación tienen
sistemas de control de densidad de color en tiempo real; esto permite asegurar que la estabilidad de color se mantenga durante toda la tirada facilitando así el trabajo del operador ya que éste solo se debe dedicar a gestionar los trabajos y a lanzarlos a la impresora.
Por otro lado, estos mismos equipos digitales también se utilizan para tirar
pruebas de impresión procedentes de flujos de trabajo con acabados tales como imposiciones terminados en formato cuadernillo. Estos trabajos normalmente se imprimen con plotter, teniendo que ser manipulados posteriormente para comprobar si la imposición es correcta antes de pasarla a producción.
¿Por qué se utiliza el plotter para este tipo de trabajos? La respuesta sería por la calidad y por el tamaño necesario para imprimir los trabajos impuestos.
La prueba realizada es la que verá el cliente final para dar el visto bueno, antes de su producción.
En estos momentos,
muchos impresores usan equipos multifuncionales para realizar este tipo de pruebas; existen varios motivos: por un lado la velocidad y el coste de la impresión comparado con el plotter, y por otro, no menos importante, porque no se necesita manipulación, el trabajo sale impuesto y acabado (plegado y grapado si se requiere); por último, ofrecen una calidad similar a la salida offset.
Ante la pregunta de muchos impresores, ¿puedo hacer que mi equipo digital imprima igual que el equipo offset?, la respuesta es “sí”. ¿Cómo? Realizando por ejemplo un perfil de la máquina de offset que cargaremos en la gestión de color del controlador de la máquina digital.
Para poder crear este perfil, existen herramientas y dispositivos tales como los
espectrofotómetros, que nos ayudan a realizar las lecturas, crear el perfil necesario y cargarlo posteriormente en el equipo.
De esta manera tan simple, tendremos una semejanza entre nuestro equipo digital y la máquina de offset.